Interiores / 27 abril 2011

Interiores #64: El tamaño no importa

El departamento de Leandro (Lolo, para los amigos) es re chiquito. Pero cuando la intención es firme, no hay cosa que te impida convertirlo en su mejor versión. Y si el ojo está entrenado, ¡mejor aún!

Combinando decisiones inteligentes con perseguir tesoros por internet y mercados, logró aprovechar cada metro y destacarlo. En la cocina, por ejemplo, los estantes de casi todo el perímetro le permitieron hacer uso (¡nunca es abuso!) de objetos decorativos, sin quitar espacio para la tarea culinaria, que desarrolla más que bien.

Todo el departamento es un despliegue de hallazgos personales de hoy, más artículos de la abuela (la colcha salió de sus agujas) y objetos de su propia historia. Otros más son de su autoría: Marcos con ciervos, con títeres de un sólo dedo, y con asistencias a shows y matineés. ¿Y los frasquitos con rocklets? Súper idea no apta para bajoneros.

Fotos: María Tórtora

publicado en Interiores


Recorrido fotográfico por una casa, contado desde la experiencia de los que la armaron y la viven.